LAS FIESTAS LAS BODAS LOS JUEGOS EL VIDURAL REFRANERO INICIO
"EL MAYORAZO" SEMBLANZA DEL P. JOSÉ O.P DOLMEN DE BARANDÓN  

 

LAS FIESTAS

     Se puede afirmar que las fiestas eran el medio fundamental de socialización y de comunicación de estos pueblos de montaña. Iban jalonando fechas y estaciones repartidas de una manera muy sabia.

La fiesta semanal era el domingo, fiesta de guardar, y se aprovechaba para ir a Misa a Ponticiella y mantener todo tipo de relaciones según la edad. Ello obligaba a una mayor limpieza e higiene. Casi todo el mundo acudía a alguna de las misas.

Guadalupe es la patrona de Trabada, el 6 de julio, en honor a la virgen de tal advocación. Era el día más importante del pueblo.

La fiesta era pagada por “el del ramo”, que, de forma rotativa tocaba a cada una de las casas.

El mayordomo, o el ramo, tenía que pagar la misa, los voladores, la música, y los permisos, darles de comer al músico,  al cura y a los guardias que normalmente se hacían presentes.

Después de la misa y la procesión, un poco de baile, y a comer: Entremeses, sopa, garbanzos, arroz con pita, carne asada, cordero, brazo de gitana, vino, café, coñac… hasta reventar. Casi parece imposible que algunas personas pudieran comer todo lo que comían.

En cada casa se juntaban los parientes de los pueblos limítrofes, a los que se les devolvería la visita el día de su fiesta y así se hacía una rueda festiva que ocupaba muchos días del verano.

Por la tarde, enseguida empezaba el baile al son del acordeón ya que muchos jóvenes venían caminando de pueblos lejanos y, sobre todo las mujeres, se tenían que marchar antes de anochecer.

Una costumbre típica era invitar a comer algo en tu casa a estos jóvenes de otros pueblos. Ellos te devolverían el favor el día de su fiesta.

Al oscurecer, la cena reproducía en tono menor la comida del medio día.

Y lo más pronto posible el acordeón volvía a sonar, anunciado por algún volador, para empezar a “pollavilla”.

La práctica totalidad de los pueblos de la parroquia y del concejo tenían su fiesta patronal, que se celebraba entre los meses de junio y septiembre ambos inclusive, salvo raras excepciones.

Trabada celebraba una segunda fiesta el 7 de agosto, Sangaitano, en una ermita a un kilómetro del pueblo, bajo la advocación de San Cayetano, más colectiva, sin “ramo” pero de similares características que la primera.

Además existían otras de carácter más global que tenían una resonancia especial:

Santuciomo, el 4 de mayo, en Ponticiella.

San Pedro, el 28 de junio, en Villayón.

Santiago, el 25 de junio en Ponticiella.

Las Virtudes: El martes de Pentecostés se celebra la fiesta original y popular, con procesión y posterior baile.

Las Virtudes, Fiesta de hermandad, el tercer fin de semana de agosto. Es ésta sin duda, la fiesta más importante del Concejo de Villayón, y se celebra en el campo de Las Virtudes.

Vamos a dar a esta realidad un especial explicación:

Allá por la década de los 60 un nutrido grupo de jóvenes, sin ningún lugar de esparcimiento, comenzamos a jugar al futbol, casi entre los pinos. Con el ánimo del bueno de D. Manuel, que hizo un cine club, comenzamos a idear la forma de que los pinos "se fueran cayendo por las noches", y nosotros jugábamos y ampliábamos el campo por las tarde de los domingos.

Así se logró hacer un primer campo de futbol, atracción y orgullo de los del lugar.

Pasados los años, aquella juventud emigró en su gran mayoría y la añoranza, el deseo de verse, el volver a las raíces y no olvidarlas, nos llevó a hacer la "ASOCIACIÓN CULTURAL VIRGEN DE LAS VIRTUDES".

Por medio de esta asociación se logró hacer un área recreativa, un magnífico campo de futbol, canchas múltiples, vestuarios, kiosco de la música, parrilla, forestación nueva y decoración de la capilla, monumento al árbol, al emigrante,,, En definitiva, recuperación de la historia y lugar de encuentro.

Fiesta el día grande con comidas campestres, familiares, colectivas, todo tipo de actividades lúdicas y la gran romería y verbena el sábado de la fiesta grande.

Y, junto con las fiestas, las ferias:

San Cibrán, el 16 de septiembre, en Valdedo.

Os Santos, el 1 de noviembre, en Villayón.

San Martín, el 11 de noviembre, n’os chaos de Samartín.

Importancia especial tenía el antroiro, carnaval, con comida especial, los disfraces, el canto del aguinaldo por las casas y la cena colectiva de los jóvenes en alguna de las casas con lo que se había sacado del aguinaldo, terminando con baile en alguno de los pueblos.

Algún “esfoyón” también acababa con baile.

Las bodas indefectiblemente debían dar “ua pollavilla”, si no querían soportar durante muchas noches interminables cencerradas con todo tipo de artilugios de lo más imaginativos.

Volver

LAS BODAS

Las bodas tenían un ritual profano eminentemente socializador.

En Trabada, como en la mayor parte de los pueblos de montaña del occidente asturiano, existe la inteligente costumbre de hacer la manda para el mayorazo. Esto permitía no seguir dividiendo los pequeños caseríos, ya de por sí minifundistas y, a la vez, facilitaban el cuidado de los ancianos que vivirían y serían atendidos para siempre en su casa, junto con el hijo casado en casa, el mayorazo, y sus hijos.

Normalmente la novia venía de otro pueblo, en el que se había hecho la boda y en cuya casa paterna se había dado el banquete de mediodía a todos los invitados.

A la tarde se emprendía viaje hacia el pueblo de destino, en este caso, Trabada.

Después de entrar y tomar posesión la novia de su nueva vivienda, toda la comitiva la acompañaba a visitar cada una de las casas del pueblo, así todos los vecinos  conocerían y saludarían a quien  sería la nueva vecina.

Los novios regalarían una hogaza de pan a cada casa (el cantello) y éstas invitarían con nueces, avellanas y algún otro dulce preparado para el caso, y que más tarde se entregaría a los más pequeños que acudieran a la fiesta.

Terminado el cortejo y la presentación en todas las casas del pueblo (no acudir a alguna era señal de profundísima enemistad) había que juntarse en la casa del novio para cenar.

Terminada la cena, el baile, bien en la sala de la casa bien en otra que se prestaba para la ocasión si el tiempo obligaba a hacerlo a cubierta.

 En caso de negarse a dar este baile al que acudían todos los mozos y mozas del contorno, se organizaría la gran cencerrada.

Volver

LOS JUEGOS:

      El carretón: artilugio de madera, con dos ruedas traseras, con eje sobre el que se apoyaban unos cojinetes y una tabla agujereada en la parte delantera en cuyo agujero se introducía el dirigible, con rueda delantera y manillar para conducir.

Como es obvio sólo andaba cuesta abajo, y cuanto más cuesto, mejor, y así los golpes y descalabros estaban en relación con la dimensión de las ruedas, lo ajustado de las mismas, la pendiente del terreno y la osadía del conductor.

Llegado al final de la pendiente, vuelta a empezar. Y así toda la tarde del domingo y algún día por semana.

El trayecto preferido era desde a porta de Rosa hasta a Pena Vaca de Muxardín, pasando por a fonte Trabada.

Pasar a fonte, baxar a rambla, cruzar a carretera y chegar a Penavaca, y todo eso sin caer, era síntoma de triunfo y ufanía.

Os bolos: Es una modalidad original de la zona occidental interior: El tirador coge una bola de cerno y se coloca en un poyo, la bolera está a unos 10 metros con una hilera de bolos armados con bulla sobre una piedra de algo más de un metro de ancho, ligeramente inclinada hacia el poyo. El campo está dividido en tres rayas y la última es pasar la pared que cierra una finca llamada A Senría. Cada raya da un punto. Quien logre lanzar el mayor número de bolos a la mayor distancia adquiere más puntos y el que meta un bolo na Senría, gana. Todo ello siempre que la bola pase la primera raya, de lo contrario, “queisa”, lo que significa que nada se consiguió con la tirada.

As anducas: Palos altos con posapiés, para dar grandes zancadas y hacer proezas con las dos patas o con una girando.

A’scarabañola: Dibujo en forma de 8, con rayas anteriores y una posterior a la que había que lanzar una piedra y regresar al punto de origen empujándola, saltando siempre a la pata coja, y sin que se quedara nunca la piedra en la raya, ni se omitiera ningún paso.

El pincho: clavar y tirar el del contrario.

El piocampo: Similar al pañauelo. Pero con solo toocar al conntrario ya ganaba.

El pañuelo: Dos equipos numerados. En medio una persona con el pañuelo, cuando ésta dice un número salen los dos que lo poseen. Quien pise la raya central o toque al contrario sin haberse desprendido el pañuelo, pierde. Se trata de coger el pañuelo y regresar a donde está tu equipo sin que te toque el contrario. Si lo logras ganas, si te toca, pierdes. Y así hasta que en uno de los equipos sean todos vencidos.

El apiyo apiyo: Hay que marcar un espacio para poder correr por él. Uno tiene que pillar a los demás, tocándolo. La gracia está en esquivar al perseguidor y en cruzarse entre éste y  el perseguido para despistar al primero. Se hace un guirigay simpático.

El escondite: Uno cuenta, los demás se esconden. El que cuenta sale en busca de los escondidos, cuando los ve regresa a la madre y dice “por fulanito”. Ese se descartó. Así hasta que aparecen todos. Si alguno regresó a la madre antes del que contó, ése se salva.

A lluita: Cogerse fuerte y mutuamente del cuerpo hasta tirar al contrario.

Volver

EL VIDURAL
(
Semillero de vocaciones religiosas en el s. XX)

 Caserío del Municipio de Villayón y de la Parroquia de Santiago Apóstol de Ponticiella, limítrofe con el pueblo de Trabada en el Principado de Asturias. Durante todo el siglo XX fueron seis vecinos dedicados a la labranza y a la ganadería. Durante dicho siglo salieron de ese caserío muchas vocaciones sacerdotales y religiosas:

* Rvdo. D. Jesús Rodríguez Fernández, Párroco de Santa María del Monte, Tapia, en donde murió y está sepultado.
* Rvdo. D. José López, Párroco de Villapedre, Navia, en donde murió y está sepultado.
* Rvdo. D. Andrés Avelino Rodríguez Fernández, Párroco de Arbón, Villayón, en donde murió y está sepultado. Especialista en Catequesis Parroquial.
* Rvdo. D. Jesús López, Párroco de Cartavio, Coaña, en donde murió y está sepultado.
* Rvdo. D. Luis Rodríguez Arias, Párroco del Valle, Piloña, en donde murió y está sepultado.
* Rvdo. D. Constantino Rodríguez Arias, Párroco de Villacondide y Trelles (Coaña).
* Rvdo. Fray Jesús Rodríguez Arias O. P. Lector en Teología, Doctor en Filosofía, Licenciado en Filosofía y Letras. Residente en Madrid.
* Fray José Fernández Martínez O. P. Historiador y Escritor. Residente en Yauco, Puerto Rico.
* Fray Jaime Fernández Martínez O. P. licenciado en Teología. Párroco de Santa María del Carbayo, de Villarmental y Fuentes y Capellán de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados de Cangas del Narcea. Resicdente en el Monasterio de Corias.
*Sor Marina Rodríguez Arias, Carmelita en el Rosal; Pontevedra, en donde murió y está sepultada.
*Sor Lucía Presentación Rodríguez Arias, Franciscana en Ribadeo, Lugo, donde reside actualmente.
*Sor Paulita Trinidad Fernández Rodríguez, Dominica en el Monasterio de la Encarnación de Cangas del  Narcea.
*Sor Rosalía Rodríguez Fernández, Clarisa en Ribadeo, en donde murió y está sepultada.
*Sor Lucía Rodríguez Arias, Clarisa en Ribadeo en donde vive.
*Don José Maria Rodríguez Arias, Maestro nacional, fallecido en Oviedo y ex-Alcalde de Villayón.

Personajes distinguidos del caserío de El Vidural.
Fuete: Fray José Fernández Martínez O. P. (Yauco, Puerto Rico).

Volver
 

"EL MAYORAZO"

EL DERECHO AGRARIO TRADICIONAL DE ASTURIAS: ¿RELICTO DEL PASADO O PRESENTE FUNCIONAL?

(Una ponencia de Fernando Inclán Suárez -12 / 05 / 2006- en el Congreso de Estudios Asturianos. Deferencia del ponente para esta web).

  Afirma Azorín que "la vida del campo es independencia y sociabilidad al mismo tiempo". Esta intuición literaria plasma magistralmente la esencia de la tradicional organización agraria asturiana. La autonomía familiar está representada por la casería y los intereses colectivos por la parroquia, como instituciones clave, sirviendo la "andecha" o ayuda mutua para solventar los trabajos perentorios agrarios.

  En la presente Comunicación, ciñéndonos al Derecho Privado, nos fijamos solamente en las figuras jurídicas que giran en torno a la casería; las concernientes al disfrute de los montes comunales, el régimen de las aguas, el arreglo de los caminos y la gestión y tutela del sistema pastoril corresponde a la parroquia, cuya conservación y rehabilitación ha de hacerse por cada una en sus normas estatutarias.

  La inicio con una breve exposición histórica de la casería y las razones ecológicas de su conservación indivisa. Como decía Unamuno, en un escrito etnográfico, "la naturaleza del suelo y su pobreza han impuesto el cultivo intensivo y el régimen acasadero".

  Su régimen sucesorio constituía más una herencia de gestión que de propiedad, pues la casería pertenece, en realidad, al grupo familiar. La Transmisión se efectuaba mediante el casamiento de un hijo para la casa a través de dos momentos: la donación "propter nupcias", en las capitulaciones, en que se hacía la "manda" y se constituía la sociedad familiar a "mesa y mantel" o "al estilo del país", especie de sociedad a pérdidas y ganancias entre ambos matrimonios; y la mejora testamentaria, en que los padres ratificaban la donación de tercio y quinto. Promulgado el Código Civil, pudo ampliarse la mejora hasta dos tercios (el de su nombre y el de libre disposición), con la conservación íntegra de la explotación agraria siempre que  el elegido para continuar en la casería abone a sus herederos sus legítimas en metálico.

  El desarrollo y la industrialización y especialmente las pensiones de la Seguridad Social, que garantizan una pasable independencia a los padres en su vejez, deteriora este sistema sucesorio y trastoca el concepto de mejora que termina por basarse en un acuerdo o decisión filial con imposición de sus condiciones. Y, si hasta mediados del siglo XIX  regía en la zona central de Asturias, incluso entre los colonos estables, en la actualidad, la necesidad de suelo urbanizable y la primacía de la agricultura a tiempo parcial hacen que la práctica de la transmisión íntegra de la casería quede limitada al Occidente de la Región, a partir del cordal de La Mesa y el río Nalón, aunque se den casos entreverados en todo el Principado.

  Como excepción, en la montaña central y oriental nunca se dio la familia "souche" o troncal ni el término casería significó unidad de producción. Causas: el aprovechamiento de los recursos naturales con carácter colectivo por la parroquia; la escasez de tierras de labradío y que la clase dominante obtenía sus rentas mediante las "comuñas" del ganado y no de los "foros", como en el resto de la provincia. Entonces, la herencia se reparte de forma igualitaria entre los hijos, salvo que ,, como  "renta del afecto" se deje la casa y lo existente "de puertas adentro" a quien atendió a los padres en su ancianidad, generalmente una hija.

   El cometido del artículo 16 del Estatuto para impulsar la conservación y compilación del Derecho Consuetudinario Asturiano se presenta harto problemático. Los comentaristas del mismo -Leopoldo Tolivar Alas y Alberto Arce- muestras escasa ilusión ante esta tarea compilatoria; hablan de la inexistencia de un auténtico Derecho Foral Asturiano; sólo hay hábitos aislados, sin pretensiones de formar un "corpus iuris" y sin continuidad geográfica.

  Nuestro Derecho Tradicional, en su mayoría de carácter agrario, surge como una serie de hábiles medidas para el óptimo cultivo de una orografía difícil y pobre dentro de una sociedad de economía natural, precapitalista autárquica y de mera subsistencia. ASí el notario Eduardo Menéndez Valdés dice que el Derecho Civil gallego tiene su origen en necesidades impuestas por la miseria de la tierra.

  A continuación se hace un estudio de las figuras e instituciones recogidas por el equipo de investigación de la Comisión Especial de Derecho Consuetudinario Asturiano.

  Se desechan, en primer lugar el "foro" y la "manpostería", por encontrarse aquel abolido y ésta en total desuso.

  La sociedad familiar "a mesa y mantel", considerada por muchos como una institución fantasma, dado que desde la Compilación de Derecho Civil de Galicia, de 1963, se desconoce su propia realidad jurídica, nunca autónoma, sino ligada a la mejora hereditaria, de la que es elemento inherente par ala conservación de la explotación agraria, presenta obstáculos al desarrollo y modernización por el claro dominio paternal en su dirección y administración. La vigente Ley gallega de 1995 desperdició la oportunidad de crear una nueva fórmula asociativa o cooperativa de carácter familiar acorde con el moderno Derecho agrario y las directrices comunitarias.

  De la servidumbre temporal de paso en nuestras "llosas" o erías, conocida hoy como "serventia", solamente diremos que olvidada por legisladores gallegos en sus primeros textos normativos,, su naturaleza jurídica hubo de fundamentarse en jurisprudencia de Tribunales canarios. Es una cuestión a resolver por la Concentración Parcelaria, sin mayor gravedad, al trabajar un solo ganadero algunas erías para producir maíz forrajero.

  La aparcería, conceptuada como el arriendo de colonos pobres, está en total desuso. Y la pecuaria o "comuna" no merece el mínimo recuerdo, dado su carácter usurero y haber sido abolida, junto con los foros, por el Decreto del Consejo Interprovincial de Asturias y León de 19 de enero de1937.

  Podemos también reputar de arqueología jurídica al contrato de "empeño", practicado antes debido al vacío crediticio existente. El "bistechu" o "pingos", es una simple presunción a falta de pruebas documentales. Todo lo referente a linderos ("finxos", "cárcobas", "sucus" y "sebes"), es pura etnografía jurídica. Y la "palmada" y la "robla", simple folklore en la venta de animales.

  La antojana, los "arrodeos" y los hórreos y paneras, con la desintegración de la casería y la transmisión de las edificaciones a diferentes titulares, están originando numerosos conflictos, con el incremento de la judicialización.

  Creemos, en definitiva, que el punto primordial de nuestro Derecho Tradicional radica en la integridad de la casería, en su transmisión indivisa como condición imprescindible para su supervivencia. En el I Congreso Jurídico de Asturias, celebrado en 1987, siguiendo en parte mi comunicación, se aprobó en sus Conclusiones que, puesto que tal cuestión tenía respuesta adecuada en el "Estatuto de la Explotación Familiar Agraria", de 1981, para aquellas casería viables reconocidas por la Administración, debería ampliarse a las medianas, muy numerosas, a cuyo fin sería necesario instar la modificación del artículo 16 del Estatuto.

  Al día de hoy, el panorama es totalmente distinto: por un lado, el régimen "foral" que pretendía instaurar la mencionada Ley de 24 de diciembre de 1981, jamás fue aplicado, a causa de de la burocratización del Ministerio de Agricultura, derogándose en 1955; y  por otro, el acelerado cambio acaecido en el campo asturiano hizo que desapareciesen no sólo las caserías marginales, sino gran parte de las medianas o de transición, que entonces tenían visos de poder convertirse en rentables, pasando  sus titulares, en el mejor de los casos, a engrosara el sector de la agricultura a tiempo parcial, en continuo crecimiento, alcanzando la falta de sucesión activa un gran número de explotaciones.

   Ante esta situación, consideramos que el sistema sucesorio del Código Civil, y, en especial, la mejora amplia, conforme se practica tradicionalmente en el Occidente de Asturias, es lo más justo y conveniente para la conservación íntegra de la casería, siempre que se trate de un patrimonio dinámico o de producción, único merecedero de protección legal.

  Del dictamen de lo Comisión Especial de Derecho Consuetudinario Asturiano parece deducirse que al no formar nuestras costumbres un auténtico "corpus iuris", la aplicación de la Compilación no podrá hacerse mediante la vecindad civil, a tenor del artículo 14 del Código Civil, quedando, entonces, convertida en un elenco de figuras y hábitos jurídicos, desprovistos de obligatoriedad, cuya única ventaja sería estar exentas de la necesidad de prueba procesal. Para Joaquín Arce esta mínima labor compilatoria choca con el espíritu y la naturaleza de la costumbre, puesto que "el impulso conservador no deja de mediatizar su esencial espontaneidad, porque quien la debe practicar o no y, por ende, conservar o extinguir no ha de ser otra que la misma fuerza creadora".

  Dejando de lado disquisiciones de lógica jurídica, seamos pragmáticos: ¿Qué servicio puede reportar al campesinado astur la futura Compilación? Teniendo en cuenta como norte el discurso de Pedro de Silva en el I Congreso Jurídico de Asturias, donde habló de seguir el camino abierto por el Estatuto, "con sentido de la realidad, con sentido de la utilidad, con sentido del progreso, es decir, con sentido común", estimamos que el campo asturiano nada puede esperar de la labor compilatoria para paliar sus actuales dificultades, asentadas en causas diversas de índole política y económico-social, frente a las cuales el Derecho privado carece de eficacia e incluso los Derechos forales son incapaces de detener la crisis del medio rural.

  Los conceptos estáticos de casa, familia o estructura agraria constituyen una realidad en continuo movimiento y en la permanente duda que hoy confunde a nuestro campesinado, tras una lucha constante por mejorar las caserías, solamente podemos decir con Bertrand Hervieu que "inventando el presente e imaginando el futuro es como el mundo agrícola puede asumir su pasado", debiendo reconocerse por todos "que el actual problema agrícola es un problema de la sociedad en su conjunto, es decir, un problema de civilización".

Fernando Inclán Suárez, Juez.

  (Resumen de la Comunicación presentada al I Congreso de Estudios Asturianos, leída a las 4 de la tarde del día 12 de mayo de 2006 ante la Comisión Cuarta del mismo, en el Auditorio Príncipe Felipe de Oviedo).

  Volver

 

REFRANERO
EL OTOÑO

- Si octubre truena, da vientos con pocos mantenimientos.

- Octubre vinatero, padre del buen enero.

- Otoño sereno, ventoso invierno.

- Agua de octubre, las mejores frutas pudre.

- En octubre, no molesta la lumbre.

- Si vieras el erizo cargando de madroños, sabrás que es otoño.

- De duelo se cubre, quien no sembró en octubre.

- En el día de difuntos, memoria y frío van juntos.

- Noviembre es de estío la puerta del frío.

- Marzo trae las hojas y noviembre las despoja.

- Noviembre y enero tienen tempero.

- En noviembre, el que tenga que siembre.

- Nieblas de noviembre, traen al sur en el vientre.

- Noviembre, si las flores dan, coge el azafrán.

- A últimos de noviembre, coge tu oliva siempre.

- Noviembre llovero y diciembre nevero.

- Por San Andrés, mata tu res, gorda o flaca o como esté.

- Diciembre es del año, el mes más anciano.

- A una blanca, cobertor y manta.

- En diciembre, diente con diente.

- Del quince al veintidós, el nevar es bendición.

- Hasta que llegue Navidad, no eches mano a podar.

- En diciembre un día templado, es que viene solapado.

- Si esta lloviendo en Nochebuena, no hay sementera buena.

- En diciembre, leña y duerme.

- Las uvas por San Silvestre, se comen dulces y se echan fuertes.

 

INVIERNO

- En diciembre, la tierra duerme.

- En diciembre se hielan las cañas y se asan las castañas.

- Si llueve por la Purísima Concepción, llueve en Carnaval, Semana Santa y Resurrección.

- En diciembre, diente con diente.

- Cuando el búho en diciembre canta, o lluvia o templanza

- Aluna blanca, cobertor y manta.

- En diciembre, no ha valiente que no tiemble.

- La Nochebuena y la Santa, debajo de la manta.

- Frío de verdad, un mes antes y otro después de Navidad.

- El frío puede entrar de repente, entre Navidad y los inocentes.

- Diciembre es un viejo que arruga el pellejo.

- Caliente diciembre, caliente enero, frío seguro para febrero.

- San Silvestre, coge la capa y vete.
 

PRIMAVERA

- En marzo la venta, ni dos horas esta quieta.

- A nadie debe extrañar que en marzo empiece a tronar.

- Para marzo a su mitad, la golondrina viene y el tordo se va.

- Calor de marzo, temprano es para el campo.

- Marzo, mientras mas me des, más me alzo.

- Marzo trae las hojas y noviembre las despoja.

- Marzo engañador, un día malo y otro peor.

- En abril, agua poca y nubes mil.

- A tres de abril, el cuchillo ha de venir.

- Abril riente, mata de frío a la gente.

- Buenos amigos y buenos abriles, uno entre miles.

- Abril saca la espiga a relucir.

- En abril cada gota vale mil.

- A parte de otra cosa, en abril lilas y en mayo rosas.

- Abril que sale lloviendo, a mayo llama riendo.

- Helada de mayo, agua en la mano.

- Mayo entrado, un jardín en cada prado.

- Mas vale un agua entre abril y mayo, que los bueyes y el carro.

- Cuando mayo va a mediar, debe el invierno acabar.

- El buen madero, para mayo lo quiero.

- Por mayo ríos llenos, preludian grandes truenos.

- El queso y el barbecho, para mayo esté hecho.

- Si mayo bien llovió, seco a junio sacó.


VERANO

 

- San Pedro caluroso, treinta días bochornosos.

- San Pedro caluroso, treinta días peligrosos.

- Aguas de junio, ni frutos ni gastos en julio

- Por mucho que quiera ser en julio poco ha de llover.

- Aunque raras, muy violentas son en julio las tormentas.

- frío en invierno y calor en verano, esto es lo sano.

- En julio beber y sudar y en balde el fresco buscar.

- Por San Fermín el calor no tiene fin.

- El que en julio no trilla en agosto no gravilla.

- Cuando el sol mucho calienta, barrunta tormenta.

- Quien trabaja en julio, trabaja con orgullo.

- Si en julio llueve, renace la hierba y el trigo se pierde. Da uno como el otro.

- Ni en agosto caminar ni en diciembre navegar.

- El sol de agosto cría aceite y mosto.

- En agosto, relente y agua corriente.

- Mas vale sudar que estornudar.

- Los rocíos de agosto son miel y mosto.

- En las madrugadas de agosto, han frío el viejo y el mago.

- En agosto, a sol puesto no te conozco.

- Si da por ser tormentoso, agosto será luctuoso.

- Tras la tormenta viene la bonanza.

- Por San Bartolomé, tormenta ha de haber.

- Agosto seca las fuentes y septiembre se lleva los puentes.

- A agosto poco los entiendes.

- En septiembre truenos ni malos ni buenos.

- Septiembre o se lleva los puentes o seca las fuentes.

- Septiembre, más que septiembre “se tiemble”.

Volver

 

SEMBLANZA HISTÓRICA DEL RVDO. FRAY JOSÉ FERNÁNDEZ MARTÍNEZ O.P.

            Fray José Fernández Martínez, religioso Dominico, nació en el Vidural, Parroquia de Santiago Apóstol de Ponticiella, Ayuntamiento de Villayón (Principado de Asturias), el 10 de abril del año 1921, hijo de Constantino y Josefa, una familia de labradores muy cristianos. A la muerte de su papá, en plana guerra civil española, ingresa en el Seminario Conciliar de Valdediós, en Oviedo, en enero de 1938. Después de dos años, por circunstancias contrarias a su vocación, dejó el Seminario. En esas fechas  comienza los estudios de Contabilidad, obteniendo el título de contable, con diploma expedido en San Sebastián el 10 de septiembre de 1942. En el año 1944 ingresa en el Colegio San Juan Bautista de Corias, en donde termina el ciclo de latín y humanidades, pasando después al noviciado de los Dominicos en Salamanca, profesando en la Orden el día 8 de septiembre de 1947. Cursó el primerazo de filosofía en Vergara (Guipúzcoa) y los dos restantes en Las Caldas de Besaya (Cantabria). Curso la Teología en Salamanca, en donde se ordenó de sacerdote el 28 de Junio de 1953.

            Comienza su trabajo de apostolado en el Colegio de Corias, en donde residía una Comunidad de treinta Religiosos al servicio de un Colegio, con 300 niños internos, de Administrador y Profesor. En el año 1959 fue trasladado al Santuario de La Virgen del Camino en León, de Administrador del gran complejo: Colegio con internado de 500 estudiantes internos, Santuario y Casa de Retiros. En el año 1962 fue destinado al Colegio de Santo Domingo de Oviedo como Administrador y Profesor y en donde tuvo que actuar en la construcción del nuevo pabellón, para quince salones de clases y un salón de actos y la escalera principal del edificio. En el año 1972 fue trasladado a Editorial OPE de Guadalajara y de la imprenta allí instalada. De allí, en 1976, sale con destino a Yauco, en Puerto Rico, de Administrador y Coadjutor de la Parroquia de Nuestra Señora del Rosario. En Yauco, el 29 de Junio de 1978 celebró sus Bodas de Plata. En esta misma Parroquia, 25 años más tarde, el 28 de Junio  de 2003, celebró sus Bodas de Oro sacerdotales, cincuenta años de Sacerdote al servicio de la Iglesia en la Orden de Predicadores. Por este acontecimiento el Gobierno Municipal de la ciudad de Yauco le declara Hijo Adoptivo de la Ciudad del Café Yauco. El 17 de Marzo de 2005, la Comunidad de Almácigo Bajo de Yauco le dedica la calle que va por delante de la Iglesia de San Martín de Porres, de esa localidad, Al Padre José Fernández O.P., como en el acta aprobado y firmada por el Honorable Alcalde Abel Nazario Quiñones. El Padre José es también Caballero Honorario de Colón. El P. José  lleva laborando en el ministerio pastoral de esta Iglesia Parroquial 31 años, lo mismo en la Comunidad de Diego Hernández. Atendió a la Comunidad de de Collores y Rancheras, 18 años, 12 a la de Almácigo Bajo y 6 a la de Almácigo Alto. Durante algún tiempo también atendió Buey, El Cafetal y Quebradas y un año la Parroquia de San Martín de Porres de Palomas y en algunos días de la semana dio y sigue dando  clases de Historia de la Orden de las Novicias de Nuestra Señora del Rosario de Fátima. Una Fundación portorriqueña, por la Madre Dominga Guzmán Florit O. P.

            El deporte favorito del Padre José es el estudio de la Historia. Colaboró en los periódicos locales “El Cronista” y “Panorama”.

Entre sus trabajos de historia se pueden citar, entre otros: Historia de la Parroquia de Nuestra Señora de  Yauco; El Colegio del Santísimo Rosario de Yauco; Biografía de la Madre Dominga de Guzmán Florit O. P.; Los Dominicos Españoles, 25 años en Yauco; Los Dominicos  en la Española y en Puerto Rico; Reseñas Históricas de las veinte capillas pertenecientes a la Parroquia; Semblanza de la Secretaria Rafaela Vélez; Prontuario de  Historia Eclesiástica; Cien años de los Dominicos en Yauco; Prontuario para vivir Nuestra Fe; Catequesis de Formación Cristiana; Reflexiones sobre el Santo Evangelio para el Boletín Parroquial durante varios años; Vía Crucis; Santísima Virgen del Rosario; Rosarios cantados a la Cruz de mayo; Historia del Colegio de Santo Domingo de Oviedo; Monasterio de las Dominicas de Cangas del Nancea; Obituario de la Orden de Predicadores; Estadística de San Juan Bautista de Corias; Historia del Municipio de Villayón y sus Parroquias; Mis recuerdos de El Vidural; Biografía de Monseñor García Graín O. P.; Colaboraciones en el periódico “A Parpayega” (Asturias); Alguna Semblanza  en la Gran Enciclopedia Asturiana; Yauco 2006.

            Desde esta Parroquia de Nuestra Señora del Rosario de Yauco, queda invitado el P. José a celebrar sus Bodas de Platino el 11 de Julio de 2006.

            El Padre José ha fallecido en Yauco, Puerto Rico, el día 26 de diciembre de 2007. Sus restos, acompañados de multitud de fieles, fueron inhumados, tres días después, en el Cementerio Privado de Santa Rita.

Volver

 

DOLMEN DE BARANDÓN

En el Concejo de Villayón, límite con Illano, Allande y Boal, a 930 metros de altitud existe uno de los monumentos megalíticos del occidente de Asturias. El denominado “Domen de Entrerríos”, “Llastra de Filoadoira” o “A pedroa como vulgarmente le llaman los lugareños.

 El dolmen (literalmente "mesa de piedra") es una construcción megalítica megalítica  compuesta por dos o más piedras verticales que sostienen otra horizontal. En este caso son varias las piedras verticales que sostienen dos horizontales de considerable tamaño, como se puede ver en la foto.

Se cree que los dólmenes se construían como homenaje a los dioses o como lugares de enterramiento.

Es una de las manifestaciones más antiguas dejadas por el hombre en estas zonas montañosas del Occidente de Asturias (más de 5.000 años de antigüedad, es decir, entre el mesolítico: 10.000 a 5.000 Antes de Cristo, o el Neolítico: 5.000 a 3.000 A. C.).

 
Cómo llegar:

En  Navia (O Boal, o Pola de Allande) nos desviamos hacia Villayón y seguimos en dirección a Ponticiella, al llegar a Valdedo nos desviamos en  dirección a Barandón.

 En Barandón es necesario dejar el coche en el único aparcamiento que hay: delante de la capilla de San Juan.

Una señal de “Parque histórico del Navia” nos irá orientando sobre el camino a seguir, si bien hay que fijarse bastante porque son señales muy pequeñas y que, además, no mencionan el Dolmen sino el “Parque histórico del Navia”.

La ascensión es de 4 Km.

En la primera parte podría subir un todo terreno porque en principio no hay ninguna señal que lo prohíba.

Además hay una dificultad añadida importante: en un momento (unos 600 m. antes de llegar) el camino se convierte en sendero con una bifurcación, sin señalizar. Es necesario hacer un giro en ángulo agudo a la izquierda e  inmediatamente tomar el sendero de la derecha hasta subir al descampado.

Allí,  sin ninguna señalización y sin sendero, ascender en vertical hasta encontrar un indicador alto que dice: “Refugio de caza”, y a unos 60 metros nos encontramos con el dolmen en un lugar muy abierto y dominante de varios concejos.

No se si el refugio de caza al que se refiere es el habitáculo del dolmen, en ese caso (que yo sepa no hay ningún otro refugio en los alrededores) quien lo ha puesto y quien lo permite rompe las mínimas normas de cultura y de historia.

Esperemos que pronto lo modifiquen.

 

Qué podemos contemplar en el trayecto:

 

La carretera de Valdedo a Barandón discurre por la margen izquierda del río Barandón (Después Río Polea), que desemboca en el Navia. Es una zona agreste, montañosa, sembrada de pequeños pueblos y caseríos que muestran la dureza de la vida de estas gentes a los largo de los siglos, pero con una belleza paisajística envidiable: Vegetación exuberante, pequeñas parcelas por lo general muy cuestas que en otro tiempo fueron fincas de labradío, montañas, río, riachuelos y fuentes. Es elocuente el rumor del agua, que se puede disfrutar, sólo alterado a veces por los sonidos provenientes de algún ave u otro tipo de animales.

Particularmente hermoso es el paisaje que contemplaremos a pie, con bosques frondosos de hayas, fresnos, toxo, castaños, acebos y robles, entre otros.

Atravesaremos pequeños arroyos incipientes que por pendientes muy pronunciadas nos entonarán hermosas y frescas melodías.

Con algo de suerte podemos observar algún ave rapaz o cualquiera de las especies que en la ladera de enfrente anidan en un coto privado de caza. Y si bajamos hasta el río nos refrescaremos con un agua prístina. Las truchas de este río son muy codiciadas porque viven en aguas muy batidas.

No será difícil encontrarse con rastros de jabalí, zorro, lobo u otros animales salvajes. Y con más suerte aún, poder verlos.

En definitiva, una ascensión para llenar los sentido de satisfacción.

 

 

La página del Parque histórico del Navia nos da otro recorrido, pero sólo desde la Nacional A-12, a la altura del embalse de Doiras:

 

- Tomar desvío hacia el embalse y atravesarlo dirección Tamagordas.
- Pasado el pueblo de Sarzol, tomar desvío a la derecha dirección Navedo.
- A unos dos kilómetros, coger desvío señalizado a la izquierda dirección Área Recreativa de San Roque.
- En la  curva anterior a esta área recreativa, tomar la pista forestal sobre Navedo hasta la Fuente del Penedo Redondo.
- A partir de aquí, tomar camino de sierra a la derecha que bordea una suave loma.

 (Deseamos y solicitamos que la página del Parque histórico añada este recorrido)

Enlace: http://www.parquehistorico.org/